domingo, 27 de febrero de 2011

La higiene en la edad moderna.

El concepto de higiene durante esta etapa histórica era muy diferente al actual. Despues de un periodo de esplandor de los baños y termas durante la edad media, sobre todo en zonas donde hay moriscos, entran en un ocaso, primero siendo exclusivos para clases altas, y más adelante vistos como lugar propio para contagiarse de infecciones, y donde se practicaban actividades ilegales (en algunos casos se llegó a ejercer la prostitución).

Así vemos como la higiene diaria se limita a lavarse solo algunas partes del cuerpo, como las extremidades o la cara, siempre en seco. De esta forma prolifera el uso de diversos perfumes y aromas, que como todo en esta época es un símbolo de distinción social, las clases más altas usaban olores exclusivos, mientras que los más pobres debian conformarse con otros más sencillos, como puede ser la mezcla entre aceite y hollín.
En cuanto al formato, puede ser diverso, líquido, para el pelo, bolsitas que se cuelgan entre la ropa, etc. Son por ejemplo muy usados en Castilla los guantes de olor.

Algo tambien muy importante y propio de este momento es la ropa blanca. La gente, para mostrar que estaba limpia, siempre dejaba a la vista alguna parte de la ropa interior. Esto tambien es un símbolo de distinción social, ya que la gente de alta clase usaban telas de un blanco más puro, como el algodón, mientras que los más humildes tenian que conformarse con telas más bastas y amarillentas como el lino.

Dentro de este concepto de limpieza encontramos la medicina del momento. El agua era un foco de infección, debido a las malas condiciones que tenian. Por otra parte, el agua caliente abre los poros de la piel, por lo que pensaban que a través de ellos entrarian enfermedades, por lo que el baño no es algo muy recomendable.

Esto comenzó a cambiar a partir del S.XVIII. Las corrientes medicas cambiaron debido a los avances científicos, y el baño dejó de considerarse como algo poco beneficioso para la salud, si no todo lo contrario.
Se recomendaban baños de agua caliente para la relajación y los baños de agua fría para la circulación sanguínea, entre otras cosas. Así, a partir de entonces, muchos pasan de no bañarse nunca, a hacerlo varias veces al día, aunque hay quien sigue sin hacerlo.

Junto al cambio de concepto del baño, tambien vemos como aparecen nuevos olores y aromas que se ponen de moda, como puede ser el agua de rosas, muy típico de la burguesía que no es si no, una muestra  de como estos grupos de un gran poder económico incrementan su importancia social.